Hello London

I'm starting to think that my unavoidable problems with cell phones and the hours (one less here) are a chronic disease.
November 19th. Live jazz jam session at Soul Station Madrid. All of a sudden this guy, Luques Curtis gets on stage and starts playing the double bass. Amazed me + amazed Inés



Me pongo a pensar. Es verdad, el comentario me hizo pensar. En realidad, todo el tema de aceptarse tal y como eres y bla bla bla, de que sirve? Es una manera de conformarse con lo que nos ha "tocado" sin darnos la oportunidad de ser quien nos guste ser y hacer los posible por ello. ¿Porqué conformarse con, yo qué se, la vergüenza, simplemente aceptando ser una persona vergonzosa y ya, en vez de pensar: soy vergonzosa y no quiero serlo; voy a intentar cambiarlo?
Hhm, si... en realidad, personalmente pocas veces he aceptado cosas que no me gustan y siempre he intentado remediarlo; automáticamente. No se entonces porqué hablo a veces de conservar la esencia. Supongo que porque si pensase que no tengo una esencia fija o no me preocupase por conservarla, me sentiria como el aire; vacía?. La verdad es que esto es lo primero que me ha venido a la cabeza. Es totalmente subjetivo, aunque me acabo de dar cuenta de que no; de que tampoco es eso. No creo que busque o necesite sentir una esencia en mí. Puede que sea eso de, ¿qué es lo que busco en mí? o ¿Porqué busco algo?

Y ya, lo dejo. 

Abierto a debate
Ser. Querer ser. Ser quien quieres ser

CREO que cuando uno intenta ser quien quiere ser, corre el peligro de dejar de ser quien en realidad es. ¿Pero que pasa con ser feliz? Ser quien uno quiere ser y hacer de uno mismo algo con lo que estar a gusto? Los límites me parecen demasiado abstractos, subjetivos. Siempre he sido de los que piensan que hay que estar orgulloso de lo que se tiene, pero voto a favor de ver cosas y quedartelas, rasgos en una personalidad o cambios físicos. Construirse a uno mismo haciendo de ello algo por lo que estar contentos si es que no lo estamos todavía. No hay nada de malo en construirse; de hecho, creo que es lo más. 
Por otro lado, centrarse demasiado en lo que uno quiere ser, puede llevar a olvidar quienes somos, a intentar ser otra persona, a ser artificial. Y no, eso no mola. Creo que trae muchísimas inseguridades y dudas respecto a uno mismo. Y no, eso tampoco mola.
¿Cómo somos? ¿Cómo sabemos si la manera en la que estamos actuando es propia, nuestra o es influencia? Ni una ni otra. CREO que cuando lo que hacemos nos crea una duda (del estilo de: joder, ¿soy así?), puede ser algo que no siempre hemos tenido y hemos hecho nuestro, o es simplemente un rasgo propio que no conocíamos. CREO. En cambio, cuando une puede identificar fácilmente ese rasgo o ese acto como algo externo, inusual...mal camino -> influencia, o plagio. No conviene hacerse con rasgos a los que no podemos responder, o a los que no podemos amoldarnos. 
Me estoy desviando.
Lo que quiero decir es que es a veces tan difícil marcar esos límites (aunque en realidad tampoco haya necesidad de hacerlo) y saber como somos en realidad... es tan difícil conocerse... CREO.

ps: son solo algunas de las cosas que a veces me rondan por la cabeza



Comentario anónimo
¿que problema hay con dejar de ser quien eres en realidad si empiezas a vivir como en realidad quieres?
si trabajas con lo que tu llamas "artificial" a la larga se real porque los actos que hacen que seas como quieres ser te transformaran en lo que quieres ser y eso artificial pasará a ser real ¿no crees?
PIENSO. la mejor manera de conocerte a ti mism@ es hacer lo que mas feliz te haga sin miedo a probar cosas nuevas, tus gustos y actuaciones marcaran tu forma de ser y personalidad. ASI DE SIMPLE?


Lo difícil que es a veces dejarse llevar. Olvidarte de los problemas y centrarte simplemente en disfrutar. No se, hay miedos, nervios y preocupaciones que no son fáciles de evitar. Supongo que todo depende de uno mismo. También supongo que eso último es muy fácil de decir. 
Creo y empíricamente compruebo que a menudo se da demasiada importancia a cosas muy pequeñas, irrelevantes. ¿Que porqué? Pues creo que por egoísmo, por egocentrismo. Porque nos creemos tan importantes, hasta llegar a pensar que cada mínimo movimiento que hacemos es trascendental. Sí, creo que es esa la razón. 
Preocuparse de actos o hechos con tan poca importancia, hace que nos enganchemos a clavos, hilos muy pequeños, evitando así poder volar. Nuestras ideas son claras y libres; nuestras opiniones pensadas y debatidas; nuestras ganas, puras. Pero aún así, están ahi los clavos, los hilos. Pequeñas actitudes que hacen difícil disfrutar. 
¿Cómo soltar esas pequeñas ataduras? Expulsando algo de egoísmo de nuestro ser. Animo.


El Globo, Puvis de Chavannes

Ps: Son solo cosas que me vienen a la cabeza